Eósforo y Afrodita
Eósforo.- ¡Mira!, Afrodita...un tesoro.
Afrodita.- ¿Cómo dices, Hermes?
Eósforo.- ¿Por qué me llamas así?
Afrodita.- ¿Quién eres, entonces?
Eósforo.- ¿Lo dices en serio? ¡Qué pronto olvidas a tu Eósforo!
Afrodita.- (Aturdida) La verdad es que no estoy segura que mi cerebro pueda con esto...
Eósforo.- ¡Vamos!, ven. Quiero que veas lo que he encontrado.
Afrodita.- (Va junto a él) ¿Dónde estaba?
Eósforo.- Justo entre esas columnas.
Afrodita.- Debía formar parte del tesoro de las vírgenes del Partenón.
Eósforo.- (Saca un gran collar de oro y piedras preciosas ) Deja que te ponga este collar, estarás aún más bella ( se lo pone).
Afrodita.- (Buscando en el cofre) ¿Están los pendientes y los brazaletes? (entre los dos los encuentran) Me los pondré también. (se pone el aderezo griego al completo) ¡Qué aderezo tan bello!
Eósforo.- Parece estar hecho para ti.
Afrodita.- En realidad no debería llevarlo, ya sabes que suelo adornarme nada más que con mirtos y rosas.
Eósforo.- Los metales nobles y las piedras preciosas realzan la belleza de quien los lleva, además de protegerles.
Afrodita.- Tú, por lo que veo, sabes mucho de joyas.
Eósforo.- Bastante (Va sacando piedras y otras joyas). ¿Ves ésta piedra?, es un diamante; la gema que mejor le va a Aries. Está otra es un rubí, la más indicada para Leo; y esta azul, la turquesa, la piedra de Sagitario.
Afrodita.- ¡Son bellísimas!
Eósforo.- Por aquí aparece una esmeralda, es para Tauro; y este jaspe rojo para Virgo; y esta otra, mira que color tiene, es un ónix, la mejor para Capricornio.
Afrodita.- (Busca con él) A ver, déjame que vea el anillo con la piedra amarilla.
Eósforo.- Es un Heliodoro, ideal para Géminis. Toma, este otro, lleva engarzado un zafiro, la gema de Libra. Y esta preciosidad es una amatista, codiciada por varios signos, pero a quien más favorece es a Acuario.
Afrodita.- No imaginé que hubiera tantas.
Eósforo.- Todavía quedan más; parece una colección de todas las piedras zodiacales. Mira que perla más bonita , para Cáncer,¡ Claro!. Y esa otra de color verde intenso es la malaquita, muy adecuada para Escorpión. Y aún me queda este bello coral rojo, que tanto favorece a Piscis.
Afrodita.- ¡Me encantan!
Eósforo.- También le encantan a Tauro, las sabe elegir muy bien..
Afrodita.- Sí; tiene fama de ser uno de los signos a quien más gusta las joyas .
Eósforo.- No sólo las joyas ; también el arte, especialmente la pintura.
Afrodita.- Tauro sabe comprender que la belleza física es efímera y fugaz pero que en el arte se convierte en eterna...
Eósforo.- Lo sé.
Afrodita.- ¿ De veras lo sabes?
Eósforo.- Cómo no lo voy a saber si soy su mito planetario regente.
Afrodita.- Y, yo también (reacciona) Un momento, a Tauro lo rijo yo. Deberías saber que Afrodita tiene a su cargo cargo dos signos zodiacales.
Eósforo.- Tenemos, querrás decir.
Afrodita.- (Se conforma) Está bien..., tenemos.
Eósforo.- En Tauro te vuelves más coqueta; te encanta vestir bien, llevar los mejores perfumes y puedes llegar a ser muy sensual.
Afrodita.- (Interesada) ¿Ah, sí?...¿Y qué más?
Eosforo.- A Tauro le gusta la estabilidad y cuando se acostumbra a una forma de vida, le cuesta romper con ella, por ese motivo puede ser un pareja duradera. Pero quizás, a veces, es demasiado material; le encanta el dinero y la verdad es que tiene una habilidad especial para generar dracmas.
Afrodita.- ¿Y de la música? ¿Qué me dices de la música y el canto?
Eósforo.- Cómo lo sabes ¿eh?. Pues sí; hay muchos que pueden llegar a ser grande cantantes.
Afrodita.- (Camina , adoptando una actitud algo nostálgica) El mundo no sería el mismo sin las canciones ¿Verdad?
Eósoforo.- (Nostálgico también) No, Afrodita, desde luego que no.
Afrodita.- (Entona una canción griega, y después de cantarla vuelve a dirigirse a Eósforo) No has cantado conmigo, Eósforo. ¿Por qué?
Eósforo.- (Con agrado) Prefiero escucharte, contemplarte, verme reflejado en ti.
Afrodita.- (Suspira) En la vida hay momentos verdaderamente deliciosos...
Eósforo.- Hagamos aún más delicioso éste. (Toma una rosa) No hay nada mejor para adornar un bello momento que el encanto de una rosa , la flor de Afrodita , convertida ahora en “La rosa de Tauro” (Levanta la mano en señal de entrega y admiración)
Afrodita.- (Con cierta vanidad)
Acepta, Tauro
la rosa
que Afrodita
feliz dona
a tu encanto,
pue sutil rayo
en los cielos
para ti
el lucero
y su flor
bella, serena
+ de paz
y dicha,
tu amor
por siempre
ha logrado...
(Aspira intensamente el aroma ) Tauro, me quedo con : ¡ Tu grandeza en el arte!...
( Telón)
Obra editada con fines educativos. Se autoriza su difusión y representacion en centros culturales o de enseñanza (colegios e institutos) sin ánimo de lucro.
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© Cristián Mínguez - SGAE nº 99225
Gracias por la dedicatoria y por tu recuerdo Cristián.
ResponderEliminarUn abrazo